Áreas

La Organización lleva a cabo sus actividades en tres áreas. Sathya Sai explicó que éstas corresponden a los tres caminos hacia la auto-realización y que están relacionadas entre sí:

  • Área de Devoción (camino de la devoción)
  • Área de Educación (camino del conocimiento espiritual)
  • Área de Servicio (camino de la acción)

“Éstas tres áreas son complementarias. Son como tres ramales entrelazados

en una sola cuerda. En la mansión llamada vida humana, la devoción,

el conocimiento espiritual y el servicio desinteresado son esenciales,

como también lo son el corazón, la cabeza y las manos.”

Sathya Sai ha subrayado constantemente la importancia de la unidad entre pensamiento, palabra y acción. Esta armonía entre las “3C” cabeza, corazón y cuerpo (en inglés “3H” head, heart & hands) es una base importante de las actividades que emprende la Organización.

Dichas actividades se celebran de forma regular y en grupo a través de los distintos Centros y Grupos Sathya Sai, y han de crear armonía entre las Enseñanzas de Sathya Sai y las tradiciones locales.

La mejor manera de difundir y vivir la espiritualidad es llevar a cabo, con disciplina, prácticas espirituales que nos conduzcan a una transformación personal. En la Organización, el proceso de transformación es entendido como un camino que comienza en uno mismo, luego incluye a la familia, posteriormente al entorno más cercano y finalmente abarca a toda la comunidad y sociedad.

El mensaje de Sathya Sai es universal, es válido para todos los seres humanos y está más allá de cualquier religión o creencia. Él mismo recalcó que no vino a empezar una nueva religión sino a hablarnos sobre “esta fe unitaria, este principio espiritual, este camino de Amor, esta virtud de Amor, este deber de Amor, esta obligación de Amar.” Por lo tanto, se recomienda que los programas y actividades no incluyan rituales o prácticas vinculadas con una creencia o religión en particular. De esta manera, se concibe a los Centros y Grupos como escuelas espirituales universales, lugares en los que una persona de cualquier religión sea bienvenida y se sienta cómoda.