Discursos dados por Sai Baba – 01. 13/01/65 Cierren las ventanas y protejan la lámpara

Discursos dados por Sai Baba

{SB 05} (58 discursos 1965)

01. 13/01/65 Cierren las ventanas y protejan la lámpara

( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 04 cap. 38 )

Cierren la ventana y protejan la llama

13 de Enero de 1965

Prashanti Nilayam

EL MUKOTI EKADASI (1) que se celebra hoy Se conoce también como Vaikunta Ekadasi o Festival de Vishnú.Los dos oradores que se dirigieron a ustedes describieron la tradicional leyenda del Batido del Océano, con todos los detalles que se encuentran en el Bhagavata sobre el nacimiento de Lakshmi, del Avatar Kurma, o la Tortuga, de la Montaña Mandara, de Vasuki, el Rey de las serpientes, de los Asuras (demonios) y de los Suras (dioses) y los varios objetos que salieron del mar, culminando con el Amrita o Néctar de la Inmortalidad. Esta leyenda tiene un gran significado porque, al igual que ellos, ustedes también tienen que batir el océano de su corazón y ganarse el amríta. La leyenda es sólo un recordatorio, una señal, un llamado.

El corazón que está lleno de buenas cualidades (satvagunas) es como el océano de leche. La firme contemplación de la Divinidad, ya sea como su propia realidad o como el ideal que se debe alcanzar, es el monte Mandara, situado en`el océano como la vara para batirlo; Vasuki, la serpiente que fue enrollada como una cuerda alrededor de la vara para batir, es el grupo de los sentidos, las emanaciones venenosas durante el batido, las cuales asustaron a los asura: que sostenían la cabeza. La cuerda está sostenida por los buenos y los malos impulsos y ambos luchan en el proceso del batido, ansiosos por los resultados en que cada cual ha puesto su corazón. La gracia de Dios es Kurma, la tortuga, porque el mismo Señor viene al rescate, una vez que sabe que están buscando con ardor el secreto de la inmortalidad; él viene en silencio y sin Ser visto, como hizo Kurma. sosteniendo el proceso de reflexión o manana intacto y sirviendo de base segura de todo sadhana espiritual. Muchas cosas emergen de la mente cuando ésta es agitada, pero los sabios esperan pacientemente la aparición de aquel que garantiza la inmortalidad. y se aferran a él con avidez. Ésa es la lección de la leyenda. Es un compendio de sabiduría divina.

La canción que el doctor cantó al principio de esta reunión, Bhajagopalam, lleva el mismo mensaje, quizás en una forma más sencílla y fácil. La recordación del nombre es el medio para lograr la salvación en esta era; el recordar al Señor por medio de su nombre es suficiente para salvar al hombre. El Señor es la ilusión de la felicidad (amandamaya) y es también la bienaventuranza misma (ananda). Esta bienaventuranza debe gustarse a través del nombre. Es sat-chít-ananda, o existencia, conciencia y bienaventuranza. duden de que una palabra tan pequeña como Rama o Sai o Krishna los pueda llevar por el ilimitado océano de la vida (samsara). La gente cruza vastos océanos en una diminuta balsa; son capaces de internarse por oscuras selvas con una diminuta lámpara en la mano. Así también el nombre, incluso el Pranava Om, que es aún más corto, tiene inmensas potencialidades. La balsa no necesita ser tan grande como el océano!.

La recitación del nombre es como la acción de perforar para extraer agua del subsuelo; es como el golpe del cincel que libera la imagen de Dios aprisionada en el mármol. Rompan la cubierta y el Señor aparecerá; partan el pilar, como Prahlada le pidió a su padre que hiciera, y el Señor, que ha estado siempre allí, se manifestará. Batan y saquen a la vista la mantequilla latente en la leche. Ésa es la experiencia de cada madre que cada hija aprende; en el campo espiritual, aprenden ese sadhana de los yoguis que han obtenido y han ofrecido esta mantequilla (navaníta) a Krishna.

Hay muchos que rídiculizan a estos yoguis y los desprecian. Los consideran egoístas, antisociales, vagos egocéntricos que evaden sus obligaciones y buscan asilo en la soledad y el silencio. Estar cerca no necesariamente significa ser útil o provechoso. Estar lejos no implica odio ni temor a los demás o ser inútil o inservible. A veces los virus entran a su corriente sanguínea y, obviamente, nada puede estar más cerca de ustedes; sin embargo, son enemigos mortales. Los miembros de la misma familia envidian y sospechan unos de otros; algunas veces, hermanos y hermanas pelean en las cortes de justicia y llenan los bolsillos de los abogados. Aun los hermanos gemelos rara vez se aman el uno al otro. No es el estar cerca lo que cuenta.

Estos yoguis viven en lugares solitarios y buscan maestros de la vía interior, en forma parecida a lo que hacen actualmente los jóvenes técnicos, yendo al japón, a Estados Unidos o a Rusia con el objeto de obtener conocimîentos que los ayudarán a construir una India mejor. Los yoguis no renuncian a sus familiares y amigos o a todas las oportunidades de hacer fortuna porque tengan temor de enfrentarse a las duras realidades de la vida, no huyen de la pérdida o de la derrota. Ellos van en busca del más grande secreto, el secreto del gozo eterno, que tienen que ganar por sí mismos, y con sus vidas inspiran a otros para que logren el mismo secreto, recorriendo el sendero que han encontrado útil. Nadie llama egoísta al hombre que ha ido al extranjero para prepararse como ingeniero o como doctor; entonces, ¿por qué a menudo se ha de tachar de egocéntrico al hombre que soporta mayores privaciones para prepararse aún mejor, como ingeniero de la mente, utilizando sus indudables poderes, no para esclavizarse sino para su liberación? Esto solamente muestra la ignorancia de los verdaderos valores. En los hospitales, algunos pacientes que sufren de enfermedades infecciosas crónicas son aislados para ser tratados. Los ashrams en la Selva son como hospitales, donde la gente que quiere curarse de la infección de la ilusión o ignorancia puede someterse a tratamiento y salir libre con el objeto de servir a otros pacientes.

Hoy se celebra el día en que, durante el Batido del Océano, emergió el Amrita y fue distribuido entre los dioses. Los dioses habían caído en la desgracia de perder su inmørtalidad. El hombre también es hijo de la inmortalidad; por esa razón no logra convencerse de que va a morir. Él ve morir a su vecino pero cree que de alguna manera él escapará. El sabio (jñani), sin embargo, está siempre listo para desechar ese estorbo que es el cuerpo y escapar de la prisión del nombre y de la forma. Janaka era un sabio tal. Nunca perdió conciencia de la unidad. Una vez Sulaba, mujer famosa por su talento en la dialéctica, visitó su corte y durante una discusión retó a Janaka a tratarla a ella también como su reina porque «como sabio, él no debía diferenciar entre las perSonas», a lo que Janaka replicó: «Como sabio, tú también deberías reconocer la unidad; no tiene ningún sentido hablar del hombre y de la mujer como distintos». Asi fue cómo él le enseñó el verdadero conocimiento.

El solo hecho de beber el amríta creado por mi no les conferirá la inmortalidad. Todo lo que nace debe morir; todo lo que se construye se desintegra. Pero pueden escapar a la muerte no volviendo a nacer. Una vez que sepan que son el Atma infinito, ya no estarán sujetos a la limitación del nacimiento. Éste es el secreto. ¿Cómo pueden llegar a conocer esto? Es el resultado de un largo proceso de agudización del intelecto y de purificación de las emociones e impulsos. Pueden hacer el japa más intenso o someterse a las austeridades más extremas, pero si no logran, ser virtuosos, todo será puro desperdicio. Pueden tener los mejores vegetales, ser el más capaz de los cocineros, pero si la vasija de cobre en la que preparan el sambar(2) no está cubierta de estaño, la preparación que cocinen será altamente venenosa. Por tanto, cubran su corazón con el estaño de la verdad, la rectitud, la paz y el amor; entonces se convertirá en una vasija adecuada para la repetición del nombre, para la meditación, para los votos religiosos, para los peregrinajes, para la adoración y otros platillos que preparen en ella.

Reformar nuestras tendenc
ias y carácter es una tarea en la que se rema contra la corriente. Una persona puede estudiar los textos sobre prácticas espirituales, las escrituras, e incluso puede dar conferencias sobre ellos, pero caerá en el error en cuanto sea presa de la tentación. Como la tierra reseca, el corazón parece estar libre de cualquier brote de maldad, pero cuando caen las primeras lluvias, las semillas y las raíces del subsuelo transforman el desierto en un manto verde. Había una vez un mendigo errante que rehusaba revelar su casta, su credo, su origen y su destino. Una astuta ama de casa descubrió todo esto con facilidad; ella lo hospedaba y mientras él yacía roncando profundamente dormido, le aplicó una varilla calentada al rojo vivo en la planta del pie y al instante el mendigo gritó: «Alᔑ. La verdadera esencia no puede alterarse ni suprimirse nunca.

Pero, ¿cuál es la verdadera esencia? No es la creencia religiosa particular ni el nombre ni el idioma que uno ha aprendido en el regazo de la madre. La verdadera esencia de ustedes es Brahman. En lo más profundo de su ser saben lo que “son y serán»; ésta es la característica de la existencia o Sat. Todos los seres la tienen. También tienen ansia de «conocer», de «expandirse por medio del conocimiento», de «llegar más allá». Todos los seres tienen esta urgencia de expresión, Ésa es la característica de la conciencia o chit. Todos los seres buscan «alegría». Ésa es la característica de la bienaventuranza. La bienaventuranza en ustedes busca a sus parientes en todas partes, en cada cosa, por eso se dice que la existencia, la conciencia y la bienaventuranza (sat-chít-ananda) son el vínculo entre lo particular, tvam, y lo universal, tat. Todo es existencia o asti porque todo es sat; todo está expresándose a si mismo (bhati), porque es conciencia; todo es placentero O priya, porque es ananda.

Si son capaces de dotar a su mente con esta conciencia serán sabios(jñanis). De lo contrario sólo serán máscaras. Hay tres clases de mentes: primera, la mente parecida al algodón pizcado, lista para recibir la chispa del conocimiento y renunciar, en un instante, a las debilidades y prejuicios acumulados durante eras; la mente parecida a la madera seca, que triunfa Sólo después de algún tiempo, y tercero, la mente que es como los troncos verdes que resisten con toda su fuerza el ataque del fuego del conocimiento.

El ganado corre hacia el espejismo para saciar su sed, pero ustedes deberán ser más sabios. Tienen discemimiento y capacidad de renunciación; pueden abandonar concíentemente la persecución de las cosas cuando descubren que son dañinas. Tranquilîcense por unos minutos y piensen en el destino de aquellos que corren hacia el espejismo. ¿Son felices? ¿tienen la fuerza para soportar las desgracias y las diferencias con ecuanimidad? ¿tienen algún vislumbre de la belleza de la verdad, de la grandeza del universo, de la obra del Señor? ¿Se visualizan como el centro del universo? Ustedes han leído que el Señor se conmueve cuando los sabios efectúan severas austeridadœ, escucha sus súplicas y luego viene y pregunta, suave y dulcemente: «Amado hijo; ¿qué es lo que neceSitas?» El Se ha manifestado para otorgar pero, sin embargo, consideren la gracia que lo induce a preguntar: «¿ Qué es lo que necesitas?’? El quiere que expresen en palabras lo que han anhelado, y que se lo pidan a él, a quien han traído ante si por medio del ejercicio del silencio. Ése es el pequeño juego que él juega. Y algunas veces su voluntad pide que la pregunta sea contestada en la forma que exige su plan. Kumbhakarma fue bendecido con una oportuna trabazòn de la lengua, de modo que pidió el don del Sueño (nidra) en lugar del poder de matar (nigraha).

El que ve no debe apegarse a lo visto; ésa es la forma de Ser libre. El contacto de los sentidos con los objetos despierta el deseo y el apego; esto conduce al esfuerzo y al alborozo o a la desesperación; y después al temor a la pérdida o al pesar por el fracaso y la cadena de reacciones se alarga. Con tantas puertas y ventanas a todos los vientos que soplan, ¿Cómo puede sobrevivir la llama de la lámpara interior? Esa lámpara es la mente, que debe arder firmemente, sin ser afectada por las demandas opuestas del mundo exterior. La sumisión completa al Señor es una manera de cerrar las ventanas y las puertas, porque entonces, en esa actitud de sumisión del ego o sharanagati, quedan desprovistos del ego y de ese modo no son golpeados ni por la alegría. ni por el dolor. La sumisión del ego hace que puedan recurrir a la gracia del Señor para hacer frente a todas las crisis en sus vidas y asi, los hace heroicos, más fuertes, mejor preparados para la batalla.

Resuelvan, en este día auspicioso, comenzar la búsqueda de la verdad. El Utarayana o solsticio de verano es la mejor oportunidad. El gran Bhisma esperó mucho tiempo en su lecho de flechas el amanecer de este dia cuando el sol empezaba a girar hacia el norte, en la dirección de los dioses, donde reside Shiva. El sol es la deidad que controla el ojo, la visión del hombre, y, así, estos seis meses, cuando el sol se dirige hacia Shiva, son altamente propicios para que el hombre también haga lo mismo.

Hay algunos mercaderes de madera aquí en el distrito este del río Godavari. Ellos saben que los troncos se transportan flotando por el rio corriente abajo durante las altas crecidas y que son recobradog de las aguas después de muchos kilómetros de viaje, en Rajahmundry o algún otro lugar. Los durmientes de ferrocarril se transportan, en igual fomma por el río Ganges desde las selvas de los Himalayas y se recuperan por miles en Haridwar. Únanse a la crecida, a la gran corriente, y el viaje Se volverá más fácil. Así también, si practican su sadhana para alcanzar al Señor cuando la deidad que otorga la visión se va moviendo hacia la región divina, obtienen el beneficio del momento. Hoy es también el Festival de Vishnú O Vaikunta Ekadasí. Muchos de ustedes esperan que yo vaya a la orilla del , río Chitravati y cree amríta para todos. Han ganado ustedes este néctar de palabras, este discurso, que pueden atesorar en sus mentes y con el cual pueden actuar en conformidad. Éste es el verdadero néctar celestîal; conozcan su valor, no permitan que se desperdicie, almacénenlo para que se vuelvan santos y ricos.

(1) ‘Ekadasi, el undécimo dia de una quincena.

(2) Especie de caldo de vegetales