Discursos dados por Sai Baba – 11. 13/04/96 La triple transformación

Discursos dados por Sai Baba

{SB 29} (53 discursos 1996)

11. 13/04/96 La triple transformación

( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 29 cap. 11 )

La triple transformación

13 de Abril de 1996

¡Encarnaciones de Amor! La cultura Bharateeya ha declarado desde el principio que todas las personas deberían ser felices, que todos deberían disfrutar de paz y prosperidad y que todos deberían vivir vidas sagradas.

Hoy la humanidad ha progresado inmensamente en las esferas físicas y sociales. Pero en el campo de la moralidad y la espiritualidad, la humanidad es incapaz de abandonar la estrechez mental y la mezquindad. ¿Cuál es la razón? Esto se debe a que durante muchas vidas, los hombres han crecido en egoísmo. En cada esfuerzo del hombre, en cada aspiración, el interés personal es la fuerza que lo impulsa. El hombre se ha convertido en un juguete en manos del egoísmo. Cualquiera que sea el objeto que busque, a quienquiera que ame, esto se debe al egoísmo y no al objeto o la persona en sí. No da ningún paso que no sea por interés personal.

Este egoísmo intenso ha causado la decadencia total de los valores humanos. Este monstruo del egoísmo ha invadido cada campo de la actividad humana: el campo físico, el social, el económico, el político y el moral.

Abandonen el egoísmo Por lo tanto, hoy el esfuerzo principal del hombre debería ser abandonar el egoísmo, desarrollar la espiritualidad y realizar lo Divino. Tres cambios básicos han de producirse en el hombre. Ésa es la verdad contenida en el principio Sai. La “S” representa el cambio espiritual (Spiritual change). La “A” representa el cambio “Asociacional” o nacional (Associational change). La “I” representa el cambio individual (Individual change). Mediante este triple cambio, la nación prosperará. Sin un cambio en el individuo, la sociedad no cambiará. Sin una transformación social, la transformación espiritual no puede producirse en el corazón.

Debido a que la conducta del individuo se ha desviado, la sociedad ha sido contaminada. El interés por el bien social debería influir en cada acción del individuo. El individuo debería abandonar la preocupación por los intereses de sus propios parientes. Debe abandonar su apego por “lo mío” y aspirar a lo divino.

Por estar obsesionado con los deseos mundanos y olvidar a Dios, el hombre está inmerso en la miseria. Hasta la devoción está manchada de egoísmo. No surge enteramente del corazón. Es sólo devoción parcial e hipocresía. Todos deben comprender que lo Divino es la base de todo en el universo. Habiendo evolucionado desde el animal, el hombre debería aspirar a la realización de lo Divino. Desafortunadamente, hoy los hombres están descendiendo a la animalidad. Como resultado, la paz y el orden están desapareciendo de todas las esferas de la vida.

¿De qué sirve todo el progreso de la ciencia, si las personas no tienen control de sus sentidos y no son conscientes de Chaithanya (la conciencia cósmica), que todo lo satura? Todos deberían reconocer la Divinidad que mora en sus corazones.

Un ministro se vuelve devoto En la tierra de Tamil, han nacido muchos grandes santos.

Muchos grandes eruditos nacieron en esta tierra. Uno de los reyes Tamil era muy aficionado a los caballos y envió a su primer ministro a comprar caballos. Durante su viaje, el ministro se encontró con un hombre santo llamado Thirukannan. Se sintió atraído por las enseñanzas del hombre santo. El sabio dijo que todos los placeres mundanos eran efímeros y que Dios era la única realidad.

Inspirado por estas enseñanzas, el ministro decidió abandonar su misión (comprar caballos) y usar el dinero que le habían dado para construir un templo a Shiva. Mientras tanto, el rey estaba preocupado por lo que le hubiera ocurrido a su ministro y se preguntaba por qué no había regresado. Se enteró de que el ministro había utilizado el dinero que se le había dado para comprar caballos para construir un templo a Shiva. Hizo arrestar al ministro y lo envió a prisión. El ministro permaneció inalterado. Continuó recitando el nombre del Señor en prisión.

Más tarde, el rey comprendió su error. Reconociendo que el ministro era un gran devoto, hizo que lo trajeran a su presencia y le preguntó qué había hecho con el dinero del rey. El ministro dijo:

“¡Oh rey! Usé el dinero para Dios. Lo que Dios había dado, yo se lo regresé a Él. Sin la Gracia de Dios, nadie puede tener nada. Sin el poder de lo Divino, no puede moverse ni una célula del cuerpo humano, ni una brizna de pasto. Todo el universo existe por la voluntad de Dios. ¡Oh rey! Por un golpe de buena suerte tú te has convertido en gobernante. Debido a mi mala suerte, yo me convertí en ministro”.

Ese ministro consideraba que su nombramiento como ministro era un infortunio. Cuando uno se convierte en ministro debe estar preparado para usar todas sus energías y poderes para el servicio a lo Divino. Sólo cuando prevalece la Espiritualidad, la condición humana florece. El loto florece cuando los rayos del sol caen sobre él. El loto de la mente, que reside en el lago del corazón humano, florecerá cuando la luz de la Divinidad lo ilumine.

El mensaje de Manikka vachakar La mente debe florecer y proclamar la gloria de lo Divino. El ministro le dijo al rey: “Debido a que tomé conciencia de esta verdad, le ofrecí a lo Divino el dinero que me habían dado para comprar un caballo”. El rey ordenó la liberación del ministro y le permitió llevar una vida espiritual, siguiendo a su propio corazón.

Desde ese instante, él comenzó a componer himnos de alabanza a Dios. Escribió muchos himnos. Su trabajo es conocido como “Thiruvachakam”. El autor es conocido como “Manikka vachakar”. Sus escritos son aforismos espirituales que contienen las verdades espirituales más sublimes.

Esta clase de transformación debería producirse en cada persona.

Sólo entonces Bharat se convertirá en un ejemplo para el mundo. Hoy los hombres se han vuelto adoradores de Mammón.

Tales personas no son humanas en absoluto. ¿De qué sirve la búsqueda incesante de riquezas si no se obtiene paz mental? ¿Por qué no dedican al menos unos momentos a pensar en Dios?

Si uno dedica una pequeña fracción del tiempo que ocupa en los numerosos asuntos mundanos, la familia, la propiedad y las posesiones, a pensar en los pies de Loto del Señor, no necesitará temer a los mensajeros de la muerte.

(Shloka) ¡Cuánta bienaventuranza obtendrán si dedican cinco minutos de las veinticuatro horas de un día a adorar a Dios! Prema y Seva (el amor y el servicio desinteresado) son, para el hombre, como las dos alas de un pájaro. Puede remontarse a cualquier altura con esas dos alas. Para cultivar estas dos cualidades uno tiene que adquirir la triple pureza de pensamiento, palabra y acción. Además, uno tiene que reducir sus propios deseos. Hoy se malgastan enormes cantidades de dinero en lujos inútiles, mientras que se escatima el gasto en incienso. ¡Qué locura es ésta! Los años vienen y se van. ¿De qué sirve el paso del tiempo si la mente de los hombres no cambia? El tiempo es precioso. Se lo debe utilizar para el servicio a lo Divino. Todas las acciones deberían dedicarse a Dios. Sólo mediante la renuncia puede el hombre realizar lo Divino. Hoy la gente ha olvidado el significado de sacrifico. Sacrificio es Yoga. El disfrute es Roga (enfermedad).

Hagan que su corazón florezca a cada instante. Ése es el modo de darle la bienvenida al año nuevo. Realicen su unidad con lo Divino.

Mi vida es amor Promuevan el amor en sus corazones y compártanlo con otros.

Ésa es la mejor forma de adoración. El amor es la única propiedad de Sai. Mi vida es amor. Eso es lo que Yo ofrezco a todos. Yo sigo dando y dando. Pero ¿en qué medida están poniendo en práctica las enseñanzas de Swami? Practiquen el silencio al menos durante diez minutos cada día. Mediten en las enseñanzas de Swami durant
e ese momento. Comprendan que en este mundo transitorio lo Eterno es inmanente. Sosténganse fuertemente de Dios.

Experimenten la bienaventuranza de la unión con lo Divino. Hagan que el amor sea el aliento vital. Con el amor de Dios en sus corazones, los antiguos sabios incluso pudieron transformar a los animales salvajes del bosque.

En el día de año nuevo, en Thamilnadu, las personas preparan un chutney hecho con frutas dulces, amargas y ácidas y lo ingieren como signo de su disposición a enfrentar todas las situaciones de la vida con ecuanimidad. El pesar y la felicidad deben ser tratados del mismo modo, como regalos de Dios.

Discurso pronunciado en Sai Shruthi, Kodaikanal, el 13-4-1996.

Yo soy la encarnación del amor; el amor es mi instrumento.

No existe una criatura sin amor; la más baja, al menos se ama a sí misma, y ese “Ser es Dios”. Por lo tanto, no hay ateos, aunque algunos quizás sientan disgusto por Él o lo nieguen, así como los enfermos de malaria sienten disgusto por los dulces o los enfermos de diabetes se niegan a aceptar cosas dulces. Aquellos que se muestran muy satisfechos con su ateísmo, un día, cuando su enfermedad haya desaparecido, se deleitarán en Dios y lo venerarán.

—BABA