Discursos dados por Sai Baba – 11. 18/06/89 La respuesta de Dios

Discursos dados por Sai Baba

{SB 22} (38 discursos 1989)

11. 18/06/89 La respuesta de Dios

( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 22 cap. 11 )

La respuesta de Dios

18 de Junio de 1989

¡Queridos estudiantes! El árbol de sándalo, sin la menor traza de amargura, imparte su fragancia aun al hacha que lo derribe.
La Divinidad responde de la misma manera. Algunas personas, ciegas por su ignorancia, arrogancia y locura, pueden decir toda clase de cosas sobre Dios. Ellas pueden hasta imaginar que han agredido a Dios. Pero Dios permanece totalmente inafectado. Aun a tales personas malas, con mente perversa, Él ofrece sus bendiciones y gracia.
Lo bueno y lo malo son el anverso y el reverso de todo objeto.
Los ciudadanos de Ayodhya tenían gran amor y devoción por el Señor Rama. Sin embargo, a pesar de todos sus ruegos por que permaneciera en Ayodhya, Rama decidió irse para el bosque. Cuando Rama no les respondió, todo su amor y devoción se tornó amargura y resentimiento. “Solíamos pensar que el corazón de Rama era dulce como el néctar. Sentíamos que este corazón era suave como la mantequilla. Nunca pudimos llegar a pensar que Él sería tan duro de corazón”. Tales fueron los amargos sentimientos de los ciudadanos de Ayodhya. Este era el reverso de lo que antes sentían por Rama.
Lo bueno y lo malo existen en cada objeto Cada objeto lleva en sí lo bueno y lo malo, la ganancia y la pérdida, lo digno y lo indigno, y similares pares de opuestos.
La separación y la asociación son ambas causas de pena para los devotos. La separación de buenas personas causa sufrimiento. La asociación con malas personas es penosa para ellas. La disciplina espiritual más importante para el hombre es buscar la compañía de los buenos y evitar la asociación con los malvados.
Los hombres de hoy buscan los frutos de las buenas acciones, sin comprometerse en ninguna buena acción. Desean evitar las consecuencias de las acciones pecaminosas mientras se entregan a ellas. Si desean evitar los resultados de las malas acciones, deben evitarlas. Si desean los frutos de acciones meritorias, deben hacer actos meritorios.
El hombre debe desarrollar las cualidades de amor y tolerancia.
El amor crece dando y olvidando. El egoísmo crece tomando y olvidando. ¡Estudiantes! Ustedes deben darse cuenta, aun a esta tierna edad, de lo infinitamente preciosa que es la vida. Existen innumerables cosas que ustedes tienen que aprender en la vida. Deben hacer buen uso de cada minuto de su tiempo. Velen por que sus corazones permanezcan puros y sin mancha.
El Señor Dakshinamurthy trasmitía su mensaje a través del silencio. Él escasamente hablaba. Con la mera vista él podía impartir las más profundas verdades acerca del universo y la Divinidad.
En una ocasión, en el transcurso de sus viajes, Él llegó a la orilla del océano; estaba encantado de oír las vibraciones del Omkara que venían del océano. Éste representaba el sonido divino primordial (el Shabda Brahman) que simboliza la grandeza y majestad de la Divinidad.
Dakshinamurthy sacó una lección de las interminables olas que llegaban a la orilla del océano. Notó que tan pronto algo de basura caía al mar, éste la sacaba fuera a la playa por medio de una serie de olas, sin retenerla ni siquiera por un breve momento. Dakshinamurthy cuestionó al océano: ¡Qué egoísta eres! Eres infinito e insondable. ¿No puedes hacerle algún lugar a esta pobre cosa? Es demasiado egoísmo de tu parte el no tolerar esta pobre cosa a pesar de tu vastedad”.
El océano le dio una respuesta apropiada: “¡Señor! No hay nada desconocido para ti. Si hoy yo permito que este pedazo de suciedad permanezca conmigo, muy pronto estaré lleno de desechos flotantes y mi forma entera cambiará. Por eso, desde el principio tengo que sacar cualquier cosa que sea sucia y contaminante. Sólo entonces puedo permanecer puro”.
Sostengan la Verdad De la misma manera, toda persona debe alejar aun el más pequeño pensamiento malo que surja en su mente. El tratarlos como cosas pequeñas y sin importancia, significaría dejar que tales cosas entren en la mente y, a su debido tiempo, la llenen completamente. En el proceso, la naturaleza entera de la persona cambiaría. Su esencia humana sería minada. De aquí que se debe hacer todo esfuerzo por alejar todos los malos pensamientos y sentimientos y, lo más posible, promover las cualidades humanas.
Con esfuerzos muy pequeños se pueden alcanzar grandes cosas. Una gran serpiente puede ser destruida por un gran número de pequeñas hormigas. No se consideren a ustedes mismos pequeños. Busquen adquirir la fuerza y la determinación para llevar a cabo sus deberes. En el mundo, las dificultades afloran de vez en cuando. Los celos hacia los que son mejores son muy comunes. Los cuervos tienen animosidad contra el cuclillo; las garzas se mofan de los cisnes, pero ni el cuclillo ni el cisne se preocupan por ello. El mundo tiene muchos seres envidiosos así. No dejen que estas experiencias los abrumen. Tienen que confrontarlas audazmente y sostener la verdad.
Discurso pronunciado a los estudiantes en el Mandir de Prashanti, el 18 de junio de 1989, en su calidad de Rector del Instituto Sri Sathya Sai de Estudios Superiores.
La gente joven no se da cuenta del valor de la salud y fuerza de que gozan durante sus años mozos. Deberían aprender a llevar vidas con propósito y sin egoísmo, aun cuando disfrutan de los beneficios de la juventud y la salud, en vez de disipar todas sus energías y talentos en la persecución de objetos sensorios y deseos malignos.
Baba