Discursos dados por Sai Baba – 03. 10/02/90 Los valores humanos en la administración de empresas

Discursos dados por Sai Baba

{SB 23} (36 discursos 1990)

03. 10/02/90 Los valores humanos en la administración de empresas

( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 23 cap. 3 )

Los valores humanos en la administración de empresas

10 de Febrero de 1990

Hay muchas formas en que los cinco valores humanos básicos –Verdad, Rectitud, Paz, Amor y No violencia– pueden ser practicados en la conducción diaria de empresas. Hay diferentes aspectos del manejo de empresas, tales como marketing, finanzas, relaciones industriales, etcétera. Pero el aspecto más importante es el “manejo del hombre”. Cada país tiene su propio trasfondo histórico y cultural y los gerentes indios no deberían copiar mecánicamente prácticas importadas del exterior, sino que deberían tener en mente el ambiente indio y el carácter distintivo de nuestra nación.

Hay una necesidad específica de que los estudiantes de la Maestría en Administración de Empresas del Instituto Sathya Sai inculquen prácticas de administración, en la India, con los valores fundamentales de Sathya, Dharma, Shanti, Prema y Ahimsa. Todos los valores están interrelacionados. Por ejemplo, una lámpara eléctrica encendida puede ser comparada con Prema. Para que brille la lámpara del amor, debe haber un foco.

Ese foco es Shanti. El foco tuvo que ser conectado a un cable eléctrico. Ese cable es Dharma. Y luego la corriente tiene que pasar por el cable. La corriente es Sathya. Con la corriente de Sathya (la Verdad) fluyendo a través del cable de Dharma (la conducta recta), conectado al foco de Shanti (la Paz), la lámpara de Prema (el amor) brilla y esparce su luz. Sathya, Dharma, Shanti y Prema constituyen un todo y no valores separados.

Han de adherirse a los cuatro valores por igual.

La honradez en los negocios es una forma de servicio social Con respecto a la Verdad, a menudo se dice que la veracidad en los negocios dará como resultado pérdidas. Esto no es así. Aunque inicialmente puede haber cierta dificultad, con el tiempo, la integridad y la honradez traerán su propia recompensa.

Los estudiantes de Administración de Empresas deben convencer a sus jefes, en sus respectivas firmas, de que la verdad en las cuentas y las verificaciones contables ayuda a elevar la imagen de la empresa. Deberían contentarse con márgenes de ganancia razonables. Aun si esta política no da utilidades al comienzo, a largo plazo será sumamente provechosa. Éste es el modo de inspirar confianza. Manejar un negocio con honradez debe considerarse una forma de servicio social y un sadhana espiritual.

En el ejercicio del Dharma, las prácticas de marketing deben ser correctas para los consumidores y ha de haber justicia en el trato con los trabajadores.

En la observancia de la paz, los estudiantes de Administración de Empresas tienen que comprender que no deberían alterarse a causa de ninguna situación difícil. Tienen que mantener su serenidad y verter aceite sobre aguas turbulentas. En tales situaciones, recurrir al arma del amor.

Las relaciones fraternales traen armonía industrial Prema debe expresarse en el mundo de los negocios al desarrollar los ejecutivos el sentimiento de que todos los que participan del negocio –gerentes, trabajadores y otros– son miembros de una familia. Deben desarrollar sentimientos fraternales hacia todos. Con consideración y amor mutuos, la armonía industrial puede ser alcanzada.

En el contexto del manejo industrial, Ahimsa posee un significado social más amplio que meramente el evitar que se cause daño a otros. Impedir la contaminación de la atmósfera o de otros recursos naturales como los ríos es una de las maneras con las que una empresa practica Ahimsa.

De estas formas diversas, los administradores de empresas que adhieren a los valores humanos básicos y adoptan una perspectiva espiritual en las tareas del mundo de los negocios, pueden hacer un gran bien a nuestra gente y nuestra nación.

Los estudiantes de Administración de Empresas deben desarrollar fe firme en Dios y desempeñar sus tareas en las empresas que los puedan emplear, con dedicación a ellas y un espíritu de servicio a la comunidad.

Discurso en un seminario en Madrás para estudiantes de la Facultad de Administración de Empresas, Instituto Sri Sathya Sai de Educación Superior, el 10 de febrero de 1990