Discursos dados por Sai Baba
{SB 02} (49 de 52 discursos 1961 a 62)
06.23/04/61 Pasos en el sadhana
Pasos en el sadhana
23 de Abril de 1961
Perambur, Madrás
EL GOBERNADOR de Uttar Pradesh acaba de expresar que no ve señales de resurgimiento moral, aunque se habla mucho de logros en lo que concierne al resurgimiento económico. Permítanme asegurar que el resurgimiento moral ya está aquí y se acrecienta momento a momento. Desde luego, la reconstrucción de la humanidad sobre cimientos morales es un problema mundial hoy, no solamente un problema de la India. Cuando se hallan encaminados por el sendero de la felicidad mundana siempre serán llevados a mayor descontento, competencia, orgullo y celos. Deténganse un poco y examinen en su propia experiencia si son más felices cuando poseen riquezas mayores y si tienen más paz cuando satisfacen sus necesidades. Entonces ustedes mismos serán testigos de la verdad de que un mejor nivel de vida no es garantía alguna de felicidad. Ni tampoco lo es la educación ni el dominio de la información, de igual modo que la adquisición de destrezas no es garantía de ecuanimidad. En efecto, se percatarán de que el hombre educado de cualquier lugar es más descontento y tiene un afán mayor de competitividad que el iletrado. Por eso el restablecimiento del dharma, la tarea del avatar, es tan urgente tanto en otras partes del mundo como, según el gobernador, en este país.
La fuerza que impulse ese resurgimiento habrá de surgir de este país, pues, sin temor e incesantemente, la India ha estado proclamando la verdad. Debido a tal aliento este país todavía existe, a pesar de los tifones y terremotos en la esfera cultural. El pueblo de la India tiene una obligación mayor que los pueblos de otros países de vivir de manera tal que éstos puedan inspirarse en él para sus prácticas espirituales. Ustedes tienen la oportunidad magnífica de volver a llegar a ser los guías de la humanidad. Para ustedes que pertenecen al Sathya Sai Samajan es aún mayor la obligación, ya que deben llevar un modo de vida que sea ejemplo de un anhelo sincero. Habiendo adoptado el Nombre, su deber es actuar de acuerdo a Mi mandamiento, Como también lo es el derramar la luz de la devoción en todos los que se acercan a ustedes. Me conmuevo realmente de amor al ver tan vasta asamblea y al oír al gobernador alabar su buen orden y disciplina.
La raíz de todos los problemas está en la mente incontrolada y mal dirigida que, al igual que el río Godavari en crecida, fluye impetuosa y causa aludes y derrumbes, y devasta áreas extensas en ambas riberas. El discernimiento (viveka) y el desprendimiento (vairagya) son las dos represas que gobiernan la energía desorbitada de la inundación y llevan las rugientes aguas hacia el mar que es, después de todo, el destino que buscan.
El Brahmasutra dice: “Después de esto la discusión sobre la naturaleza de Brahmán.” (Athatho Brahma Jijñasa) .¿Después de qué? Luego del cultivo del discernimiento y del desprendimiento, naturalmente. ¿Cómo pueden implantarse? Por medio de los primeros tres objetos (purusharthas) del esfuerzo humano; a saber, el dharma o cumplimiento del deber, artha o adquisición de la riqueza, y kâma o satisfacción del deseo, o sea, la práctica del dharma en el arte de vivir. Es por esto que en el Gita, Krishna le enseñó a Arjuna el renunciamiento a los frutos de la acción (karmasanyasa), no el renunciamiento al cuerpo (dehasanyasa).
No es necesario hacer el intento por rehuir de los deberes que les corresponden por su posición y condición. Recuerden que tales deberes deben cumplirse a modo de adoración, a modo de ofrendas de la inteligencia y la destreza de uno, de sus cualidades, pensamientos y sentimientos a fin de ponerlos a los pies del Señor con un espíritu de agradecimiento por la oportunidad otorgada, sin rasgo de egoísmo ni sentido de apego a los frutos de las acciones. Los karmas obligatorios (nitya krityas) deben ser llevados a cabo, dondequiera que se encuentren, con cuidado y sinceridad. Ellos proporcionan el discernimiento y el desprendimiento indispensables.
Shankaracharya obtuvo ese discernimiento y ese desprendimiento sin pasar por las vivencias del mundo. Otros no lo logran ni siquiera después de sufrir congojas interminables. Esa es la diferencia. Ustedes ven que la muerte se lleva a la gente con la que conviven, pero no se preparan a recibirla con calma, con valor y con alegría para cuando venga por ustedes. Shankaracharya dijo que un caimán lo había atrapado por las piernas, lo que significa que el mundo o samsara lo había envuelto en sus redes; ¡y él manifestó a su madre que el caimán lo liberaría solamente si ella le permitía hacerse monje! ¡Extraño caimán ése! Sólo quería decir que si Shankaracharya renunciaba a todas las ataduras sería libre para proseguir hacia la verdad. Para tomar el voto de renunciante (sannyasa) hay que obtener el consentimiento de la madre; así que, por medio de ese incidente simbólico, Shankara la persuadió para que dijera: “Toma, toma el voto de renunciante, tienes mi permiso, es suficiente para mí que vivas a salvo”.
Desde luego que la mayoría de las personas tienen vislumbres de discernimiento y desprendimiento de cuando en cuando; pero pronto olvidan el llamado, lo pasan por alto y lo eluden con excesos o excusas. Un paso adelante y otro paso atrás… el viaje no los lleva muy lejos. Aun cuando algunos emprendan las prácticas espirituales, carecen de constancia. Como una bola de estambre que escapando de la mano cae al suelo donde se deshace, sus prácticas se desbaratan porque el agarre no es firme. En esto, como en cualquier otra cosa, tan sólo un esfuerzo constante los llevará al buen éxito. ¿Cómo lograr con rapidez buen éxito en el control de la mente? Es muy difícil contener sus caprichos, pues tiene múltiples caras y es muy dominante.
Ustedes no pueden entender la naturaleza o prakriti, que es un reflejo, una sombra de Dios; ¿cómo entonces comprenderán a Dios mismo? No. Sólo la perseverancia domará su mente, y únicamente por medio de una mente sometida experimentarán a Dios. En este caso deben volverse su propio tutor; deben adiestrarse usando la chispa de sabiduría con la que han sido dotados. Si lo intentan con toda su fuerza, la gracia del Señor estará allí para ayudarles a salir adelante.
El primer paso en la práctica es limpiar el habla. Hablen suavemente, sin cólera. No alardeen de sus conocimientos o logros. Sean humildes, deseosos de servir. Conserven su habla. No hablen. Practiquen el silencio. Esto les salvará de las disputas, de los pensamientos ociosos y de los partidismos.
Además, ejerciten la actitud de la alegría cuando otros están alegres a su alrededor y la del dolor cuando otros en torno a ustedes se encuentran afligidos. Dejen que a su corazón lo mueva la simpatía. Pero la alegría y la aflicción deben transformarse en servicio; no han de ser meras emociones. Con ponerse un traje semejante al que todos llevan no demostrarán el principio de la igualdad. Sería muy fácil. Esa es una uniformidad externa. ¿Por qué todos son iguales? Porque todos tienen la misma con ciencia divina (chaitanya) dentro de sí. Cuando el Sol se levanta no todos los lotos del lago florecen; solamente los botones maduros abren sus pétalos. Los otros esperan su turno. Sucede lo mismo con los hombres. Las diferencias existen a causa de la falta de madurez; sin embargo, todas las frutas han de madurar y caer algún día. Cada ser tiene que alcanzar la meta, no importa lo lento y tortuoso que sea su camino.
Para llegar prontamente a la meta sin pasar por las pruebas del largo viaje y sin detenerse en posada tras posada, sin ir de nacimiento en nacimiento, aprendan a hacer prácticas espirituales… especialmente la más fácil y la más rápida: el recordar el Nombre o nâmasmarana. Solamente cuando se ha hecho correctamente la conexión este micrófono funciona de tal modo que Lleva Mi voz aun a las personas que están sentadas a gran distancia. Por eso adhiéranse a Mí y la corriente fluirá a través
de ustedes y hará las cosas por su bien. La luz que reciben de la corriente que siempre fluye por el alambre de cobre depende de la potencia del foco que instalen; aumenten el número de vatios y obtendrán luz más intensa. Queda en sus manos el cómo hacer uso de Mí. La lluvia cae uniformemente por sí sola sobre la tierra; ésta produce los frutos de acuerdo con la calidad del suelo y de la semilla.
¿Por qué culpar a los muchachos y muchachas por su falta de respeto a los mayores, o por su desobediencia a los padres, o por su incredulidad en Dios, o por su infidelidad a principios de carácter elevados? Los propios mayores no les dan los ejemplos para demostrar que estos rasgos de carácter son útiles, valiosos, esenciales. Los mayores mismos – no conocen el secreto de la felicidad; se ofrecen para guiar a los jóvenes en la oscuridad, ¡pero sus linternas no tienen pilas! Maestros, gurúes, líderes de la juventud, todos se encuentran en el mismo estado. Muy pocos poseen fe inconmovible en las escrituras o en Dios; muy pocos tienen constancia para mantenerse en el dharma y para vencer la tentación de desviarse del camino recto. El amor (prema) es también una virtud muy difícil de cultivar aunque sea una posesión valiosísima. La paz (shânti) es la que hace que la vida valga la pena. Por lo tanto, con objeto de que tenga la posibilidad de fomentar más y más cada día estas virtudes, Yo bendigo al Sathya Sai Samaj (comité Sathya Sai) de Perambur. El año próximo su edificio estará listo; vendré anualmente a verlos a fin de derramar sobre ustedes la bienaventuranza que es Mi bien, el amor que es Mi don.
Traduccion Arlette M. Meyer