Discursos dados por Sai Baba
{SB 20} (31 discursos 1987)
30. 21/11/87 La paz mediante el servicio
( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 20 cap. 30 )
La paz mediante el servicio
21 de Noviembre de 1987
”Yo estoy en la luz. La luz está en mí. La luz es yo. Yo soy la luz.” El hombre que ha reconocido esta verdad se vuelve uno con el Brahmán.
El hombre se dedica constantemente a buscar la paz. El buscador de paz no debe esperar encontrarla en la religión, sino en la mente.
Buscar la paz en las cosas externas es lo que causa intranquilidad en el mundo. Primero, uno mismo debe estar en paz. Luego hay que transmitir esa paz a la familia. De la familia, debe extenderse al pueblo, a la provincia, al estado y a la nación. Pero hoy el proceso es a la inversa. Son los conflictos y la confusión los que pasan del individuo a la familia, y así sucesivamente hasta llegar al país.
Conviértanse en mensajeros de paz. Deben comenzar consigo mismos. Solo pueden obtener paz por medio del servicio. Un hombre ocioso es como el taller del diablo. Si están ocupados trabajando, no habrá espacio para los pensamientos. Entonces la mente estará en paz. Una mente apacible es la morada del amor. El amor es inherente al hombre, pero, así como una semilla debe nutrirse con abono y agua, el amor en el hombre debe fomentarse mediante el servicio dedicado y el amor (sraddha y prema). El amor es una cualidad sagrada. Es como el néctar. Un hombre que ha probado la inmortal dulzura del amor divino no deseará nada más en este mundo. La vida debe llegar a ser una manifestación constante de amor. Hoy en día el amor se manifiesta de una manera limitada, egoísta. Es necesario expresarlo a través del servicio a la sociedad.
Debe ofrecerse a otros y compartirse con otros. De esta forma, el amor se vuelve una experiencia recíproca siempre en expansión.
Practiquen el discernimiento antes de actuar Cada individuo consta de: cuerpo, mente, inteligencia y Atma.
El cuerpo es el instrumento para cumplir con los propios deberes.
El cuerpo puede actuar sólo por medio de los impulsos de la mente.
Pero es la mente la que disfruta de los resultados de estas acciones.
Sin embargo, la mente sólo obtiene un placer momentáneo de las acciones de los sentidos. Por ejemplo, cuando uno tiene hambre, la mente queda satisfecha si se aplaca el hambre momentáneamente comiendo algo. Más allá de la mente está la inteligencia (buddhi), que tiene la facultad de la discriminación, del discernimiento.
Señala lo que es bueno y lo que es indeseable o malo para el cuerpo. Cuando la mente es guiada por el intelecto, experimenta verdadera alegría.
Antes de actuar, hay que preguntarse si esa acción va a traer consecuencias buenas o malas. Cuando no se practica la discriminación, la mente se vuelve ciega.
Es el Atma lo que anima el cuerpo e ilumina la inteligencia.
Aquel que se identifica con el cuerpo se pierde en los placeres de la carne. Aquel que se identifica con la mente experimenta el disfrute de los sentidos. Aquel que basa su vida en la inteligencia alcanza la plenitud intelectual. Solo la persona que basa su vida en el Atma puede experimentar la bienaventuranza pura (ananda).
Esfuércense por adquirir la experiencia átmica Aquellos que aspiran a la bienaventuranza pura deben esforzarse por adquirir la experiencia átmica. Cuando se tiene visión átmica, se reconoce al Uno que lo impregna todo. Esta conciencia no se alcanza estudiando las escrituras.
La Organización Sai debe funcionar sobre la base de que el Espíritu que habita en cada uno es el mismo Atma. Los nombres y formas pueden variar. Cada uno debe desarrollar este sentido de unidad (de no dualidad) y prestar servicio a la sociedad con un espíritu de humildad. No debe haber condescendencia alguna.
Los antiguos sabios empezaron considerándose sirvientes de Dios y alcanzaron lo Divino mediante el servicio. Si desean eliminan su ego, deben considerarse sirvientes de sirvientes. Esta aspiración fue expresada por Ramdas (Gopanna) en el canto: “Debo volverme un sirviente de tus sirvientes y prestar servicio a tus sirvientes, ¡oh, Rama! No solamente yo, sino también mi esposa y mis hijos deben prestar servicio en todo momento”.
El sendero de la devoción Este es el sendero de la devoción. Shankaracharya, que fue el auténtico exponente del no dualismo, compuso el Bhaja Govindam para destacar la grandeza del camino de la devoción (bhakti marga) que está basado en el dualismo. El mérito especial de la devoción ha sido expuesto por Narada en su Bhakti Sutras. Es el camino del amor.
Por medio del amor, deben desarrollar el espíritu de sacrificio (tyaga) y continuar hasta fundirse en lo Divino (yoga). Cuando dejen lo que deben dejar, cuando sepan lo que deben saber, y alcancen aquello que debe ser su destino, experimentarán la bienaventuranza de Brahmán. Hay que abandonar el apego a las cosas mundanas. Hay que conocer las verdades básicas de la vida. La meta es la unidad con lo Divino. Allí reside la bienaventuranza de la inmortalidad.
Todos los aspirantes y todos los servidores Sai tienen que tomar el Atma como base para sus acciones. Deben considerarse la personificación de lo Divino y percatarse de que el Atma está presente en cada uno. Hay que sentir como propia la alegría o la pena que otros sienten. Solo entonces puede uno prestar servicio transmitiendo alegría a los demás.
En la actualidad, muy pocos cumplen sus tareas de la manera apropiada. Se habla mucho pero se hace poco. Todos deben sentir que, en primer lugar, son servidores y “trabajadores”. No se le pide a nadie que se esfuerce más allá de su capacidad. Nadie debe plantearse dejar la organización debido a que sus reglas son demasiado estrictas. Tomen conciencia de que no existe un camino más grande y más sagrado hacia lo Divino que el servicio. Es una oportunidad excelente para ustedes en este nacimiento. He aquí la forma de santificar su vida mediante el servicio prestado en la Organización Sai. De nada sirve sentarse a meditar con los ojos cerrados o ir de peregrinación. Deben realizar al Omnipresente Divino por medio del servicio.
Sai Krishna y los Arjunas Krishna reveló Su forma universal a Arjuna. Pero todos ustedes son Arjunas. Uno de los nombres de Arjuna es Partha, el hijo de Prithu (la tierra). Todos ustedes son hijos de la tierra. Por ser Parthas, no deben huir del campo de batalla. Krishna le exigió a Arjuna que cumpliera con su deber, recordando siempre el nombre del Señor.
Asimismo, todos ustedes deben tener en mente el nombre del Señor mientras llevan a cabo sus respectivos deberes. Solo entonces estará justificado el nombre de “Arjuna”, que significa “pureza”.
Dedíquense al servicio con un corazón puro.
Krishna usó a Arjuna como instrumento para escenificar Su drama cósmico. Hoy este Sai Krishna dirige Su drama con muchos miles de Arjunas. “Sé sólo mi instrumento, ¡oh, Arjuna!”. Ustedes son solo instrumentos. No se arroguen ninguna autoridad o poder, ni reclamen el crédito por algún logro. Todo su renombre y su fama se deben a su relación con la Organización Sai y al uso de la etiqueta Sai. Sin la aprobación de Sai, ¿dónde estarían? Es Su nombre lo que les ha conferido distinción y reconocimiento. Por lo tanto, recuerden el nombre de Sai y cumplan con su trabajo.
Desde las celebraciones de mi sexagésimo cumpleaños he hecho hincapié en el sadhana espiritual y el enfoque no dualista. Hemos pasado la etapa del reino de la acción y de la adoración, y ahora debemos ingresar en la etapa del conocimiento (jñana). De modo que, de ahora en adelante, concéntrense en el enfoque no dualista.
El fenómeno Sai En esta conferencia, se ha conversado sobre ciertos cambios.
No guardan relación con ningún individuo ni con algún error de parte de ustedes. Están vinculados a la situación que reina hoy en la sociedad. El mundo observa el movimiento Sai con gran atención.
Todos se preguntan: “¿Quién es este Sai? Adondequiera que vayamos, sea una tienda o un bosque, vemos fotos de Sai y oímos invocar su nombre”. Muchos se sorprenden ante este fenómeno y tratan de analizarlo por curiosidad o por envidia. En una situación semejante, no hay que dar lugar a que alguien nos señale con el dedo para criticarnos o burlarse de la organización. Cada uno debe continuar con su tarea de acuerdo con su puesto o posición.
En el futuro, todos deben tratarse como iguales, como “hermanos” o compañeros de trabajo; que no haya personas que actúen como oficiales y otros que sean la tropa. Hay que fomentar el amor mutuo. Debemos demostrar al mundo la unidad que subyace bajo la diversidad. Todos deben trabajar juntos en armonía: actuar juntos, moverse juntos, crecer juntos, compartir el conocimiento y la experiencia con todos. No debe haber lugar para los cínicos, los derrotistas y los escépticos en la Organización Sai. Queremos personas que se identifiquen completamente con la organización.
El papel de las mujeres Por muchas de las cosas que se han logrado en la Organización Sai el crédito les corresponde a las trabajadoras. Han prestado un buen servicio. En el sector de las mujeres, también deben existir las tres ramas: la espiritual, la educativa y la de servicio. Es mi deseo que ellas se dediquen a las tres actividades. En las organizaciones, las mujeres debe concentrarse en sus tareas en vez de competir por los cargos. No debe ser autoritarias. Todas son servidoras de la organización Sai. ¿Por qué tendría que haber diferencias entre ellas?
A continuación me referiré a otro tema. Hasta ahora hemos tenido un consejo mundial. Ha cumplido su propósito, pero los Centros Sai han crecido enormemente en otros países. A partir de hoy el consejo mundial dejará de funcionar. Es conveniente que en todos los países se forme un comité que vele por el funcionamiento de los centros Sai de acuerdo con la situación y los requerimientos de estos países. Cada comité informará a nuestra oficina de Prashanti Nilayam acerca de sus actividades.
El propósito de este y otros cambios es estimular y guiar a las Organizaciones Sai que han crecido a pasos agigantados en el extranjero.
Ya conocen el terreno que han pisado. Ahora deben mirar hacia adelante. Quiero que todos se comporten como hermanos y hermanas en la Organización Sai y den un ejemplo al mundo.
La relación individual y directa entre cada uno de ustedes y yo siempre existirá. Si los vínculos pueden fortalecerse por medio de las organizaciones, me sentiré más feliz. Espero que los cambios propuestos no disminuyan su entusiasmo y que sigan con sus actividades con redobladas fuerzas y de una manera ejemplar. Los bendigo a todos.
Discurso de Clausura pronunciado ante doce mil delegados de toda la India, en la Conferencia de Trabajadores Activos Sathya Sai,en el Auditorio Purnachandra, el 21 de noviembre de 1987.
El cuerpo humano les ha sido dado para un propósito grandioso: realizar al Señor que se encuentra dentro.
Si tienen un automóvil totalmente equipado y en óptimas condiciones, ¿por qué guardarlo en el garaje? El automóvil sirve, sobre todo, para viajar. ¡Súbanse y partan! Solo entonces vale la pena tenerlo. Así sucede también con el cuerpo; continúen, avancen, lleguen a destino.
–Baba