Discursos dados por Sai Baba – 47. 11/10/72 El yajna y su enseñanza

Discursos dados por Sai Baba

{SB 11} (27 de 54 discursos 1971 a 72)

47. 11/10/72 El yajna y su enseñanza

( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 08 cap. 24 )

El yajna y su enseñanza

11 de Octubre de 1972

Prashanti Nilayam

Dasara

EL YAJNA DEL Vedapurusha Sapthaha Jñana, que se celebra durante cada Dasara en Prashanti Nilayam, es un rito que fomenta el bienestar y la prosperidad de toda la humanidad. Pero es muy difícil convencer de esa verdad a los incrédulos. Muchos se preguntan sí tales ceremonias védicas pueden celebrarse ortodoxamente, con todos los mantras pronunciados en forma correcta, sólo en la India. Y además, ¿cómo puede esto beneficiar regiones en donde la gente no tiene fe en esa clase de ritos e himnos?

Estos incrédulos restringen el sentido de la palabra yajna, que significa «cualquier actividad dedicada a la gloria de Dios», no sólo la actividad prescrita en las escrituras antiguas. Actividades dedicadas a la gloria de Dios pueden ser practicadas en cualquier clima y por todas las razas. La «dedicación» asegura el éxito; sin ella, aparecerán siempre la ansiedad, el temor y el desorden. Cada actividad en este mundo es dirigida por Dios, puesta en acción por Dios, lo sepan o no. Uno sólo tiene que estar consciente de ello y compartir la emoción, estremecerse con ese conocimiento. Si Dios no es el inspirador y el motivador, ¿cómo puede el universo moverse en armonía girando tan suavemente? De otro modo, sería el caos, la anarquía y el infierno de un juego de azar.

No crean que el yajna es sólo la ceremonia celebrada en ese lugar, considerada muy sagrada, consistente en lecturas y recitales según los textos sagrados, el canto de los himnos vádicos y nada más. No, el yajna es un acto continuo; quien vive constantemente en la presencia de Dios y le dedica todo lo que hace está realizando un yajna.

Tres actos van juntos en la disciplina espiritual, como lo establecieron los sabios: yajna, dana y tapas (renunciación, caridad y autocontrol). No pueden ser separados ni aislados. La caridad y el autocontrol son partes integrantes del yajna, por esto yajna se lo expresa también como sacrificio y también por eso en el yajna es esencial el acto de la caridad, como lo es tapas, que quiere decir regulación estricta de las emociones y del pensamiento para asegurar la paz y la fe.

Existen varios yajnas prescritos por los Vedas. El yajna del Vedapurusha es una ceremonia de sacrificio dedicada al Purusha realzado en los Vedas; el Purusha mencionado en el Purusha Sukta constituye el universo y lo asume en su totalidad como los miembros de su cuerpo cósmico.

Cada jefe de familia, por su bienestar y el bienestar de la sociedad, tiene la obligación de llevar a cabo cinco ofrendas, que son las siguientes:

a) pitriyajna (en la que se rinde culto a los antepasados),

b) risi)iyajna (la que honra a los sabios con el estudio y la práctica de sus enseñanzas),

c) bhutayajrra (por la cual se venera a los animales y a los seres más primitivos, procurándoles refugio, alimentos, etcétera),

ch) manushya o atithiyajna (por la cual se es hospitalario, se sirve a los enfermos, se alimenta a los hambrientos, se comparte lo propio),

e) devayajna (adoración a Dios).

El Vedapurusha es el Purushotama o el Purusha (Ser) Supremo, el cual por su propia voluntad se manifestó como el cosmos y sus componentes. Nada existe que no sea Él; entonces, ¿cómo pueden ser diferentes? En este caso la fe es lo más importante y así tiene que ser. Piensen que son divinos; compórtense de acuerdo con esa condición soberana; entonces serán bendecidos con la experiencia, la visión, la realización, la conciencia y la bendición. Coma resultado, se fusionarán en esa bienaventuranza perdurable.

Recuerden que ustedes no pueden tener la bienaventuranza primero, así como tampoco pueden aplazar la fe hasta obtenerla. No pueden utilizar el chantaje: «Dame bienaventuranza y entonces tendré fe». Vean al Purushotama (Ser Supremo) en todos los purushas (seres). Purusha quiere decir «aquel que vive en el pura» (puerto, ciudad o pueblo). Cada uno de nosotros es el residente único de cada casa diferente de Dios. Pero el Purushotama, el residente supremo de todas las ciudades, es Dios; ustedes podrán reconocerlo si desarrollan la capacidad adecuada. Tomen este yajna realizado aquí. En este fuego las ofrendas se hacen al tiempo que se recitan los nombres de Dios, contenidos en himnos muy elaborados. Más de tres mil quinientas sesenta ofrendas se hacen diariamente durante siete días, y cada nombre describe a Dios con una forma específica, distinta, pero este fuego consume todas las ofrendas y por ese medio cada una de ellas alcanza al Dios único, el que es realmente. Consideren esto: hagan su adoración con los mil ocho nombres de Dios, un rito llamado Sahasranamarchana. Coloquen una estatua o una imagen delante de ustedes al mismo tiempo que ofrendan una flor a sus pies repitiendo los nombres uno por uno. Dios es uno solo, aunque pueda ser representado por miles de nombres.

Aunque ustedes estén reconociendo solamente al Uno entre todos estos ritos que proclaman la divinidad adváitica única, sus sentidos, intelecto y mente, con su paquete de deseos, insisten en correr detrás de lo múltiple. Esto es maya, que lanza sus encantos sobre los hombres débiles e ignorantes, creando en ellos una incontrolable avidez de satisfacer cada uno de sus sentidos.

Para concebir al Uno, el Absoluto Universal que se personaliza en Dios y la creación, no hay disciplina más valiosa y efectiva que el servicio. Los mil ocho nombres del Sahasranamarchana alcanzan la unidad, los mil nombres de la sociedad de mil caras representan solamente al Dios único que actúa esos mil papeles distintos. El Uno aparece como si estuviera enmarcado en mil cuerpos. Ésta es la verdad que tienen que captar y apreciar como lo más valioso de su vida.

Han podido observar que los pandits védicos vierten mantequilla clarificada en el fuego cada vez que termina un himno. Así ustedes, cuando toman su alimento diario, ofrecen combustibles al fuego que Dios ha prendido en ustedes para digerir la comida. Tienen que comer con devoción y profunda gratitud. El Gita dice que el fuego que cuece el alimento es Dios, el alimento es Dios, el que come es Dios, el propósito de comer es continuar el trabajo confiado por Dios o que le place a Dios, y el fruto de ese trabajo es avanzar hacia Dios.

Pero también deben celebrar otro yajna todos los días. Arrojen los deseos, las emociones, las pasiones, los impulsos y los actos egoístas a las llamas de la dedicación y la devoción. Ése es el yajna verdadero, del cual éstos son reflejos y apuntadores, guías y prototipos. Este yajna es solamente la representación simbólica y concreta de la verdad abstracta subyacente. Así como a un niño se le enseña a pronunciar las palabras cabeza, red, ola y guirnalda haciéndole asociar los sonidos y !as formas de las letras con las imágenes de los objetos nombrados, con este símbolo temporal, e! Principio eterno es traído a la conciencia.

Estas ofrendas se llevan a cabo en cada festival de Dasara para ayudarles a comprender que existe otro yajna abstracto y perdurable que cada uno de ustedes debe ejecutar para liberarse del miedo, el dolor y la ansiedad.

Ustedes se habrán dado cuenta de que los pandits cierran cada día de yajna con una oración para pedir por la paz del mundo, la paz para toda la humanidad; paz y felicidad, ya que no puede haber paz sin felicidad ni felicidad sin paz.

Lokasamastas Sukhinc bhavanthu (Que todo el mundo tenga felicidad y paz). La paz de la mente no puede obtenerse mediante la riqueza, la fama, la erudición o la habilidad. Para hallarla tienen que limpiar su mente, purificar el corazón y sentir deseos de hacer servicio a las diferentes formas divinas que se manifiestan a su alrededor. Hagan de cada actividad un acto de adoración, hagan que cada pensamiento sea un deseo ardiente por él, conviertan cada palabra que salga de su boca en
un canto de alabanza para él.

Ésta es la lección que tienen que aprender en Prashanti Nilayam cada Dasara, durante la semana en que se celebra el yajna.

Prashanti Nilayam

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