Discursos dados por Sai Baba – 35. 15/10/64 El vínculo que desvincula

Discursos dados por Sai Baba

{SB 04} (52 discursos 1964)

35. 15/10/64 El vínculo que desvincula

( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 04 cap. 23 )

EL LAZO QUE LIBERA

15 de Octubre de 1964

Prashanti Nilayam

LA ERUDICIÔN que se satisface en el número de textos aprendidos es inútil. Ustedes pueden conocer los Shastras y los Upanishads de adelante para atrás; pueden tener los setecientos slokas del Gita en la cabeza, pero si no tienen achara y vichara todo ello es una carga que es mejor evitar. Achara significa el llevar a la práctica; vichara significa el autoexaminarse continuamente.

El Shastrí habló del incidente del ciervo de oro que sedujo el corazón de Sita. Uno naturalmente se pregunta por qué Sita se dejó subyugar por esa criatura, o por qué Rama iba a creer en la existencia de una criatura tan extraña. Rama hubiera podido convencer a Sita de que era una estratagema de los Rakshasas para atraer su atención y causarles daño. Pero, igual que lo hubiera hecho cualquier hombre enamorado de su esposa, Rama persiguió al ciervo, comprometiéndose a traerlo para que Sita lo tuviera como mascota. Naturalmente, si Rama hubiese sido un ser humano ordinario, una infatuación como ésta sería condenable, pero siendo él el Señor mismo, tiene que ser juzgado en forma diferente. Todas las cosas siguen un plan, su plan.

Conozcan ese plan; está establecido en la ley moral (Dharma) expuesta en los Upanishads. El Shashi que habló a continuación explicó el Dharma tal como está establecido para los estudiantes celibes o brahmacharis. ¿Qué es el Brahmacharya? Es Charya en Brahma, o sea el actuar, el moverse siempre en Brahma. Sepan que su existencia está en Brahma, a través de Brahma, para Brahma. Es ese reconocimiento el que hace que las acciones sean Sagradas y tengan éxito. Siéntanse puros, eso hará que sus actos sean puros. Las pastoras (gopís) no se desplazaban en el Gokula sino en la residencia del Señor; no vendían mantequilla y leche Sino que utilizaban esa oportunidad para pronunciar los nombres del Señor. Palabras puras, un hablar puro; escuchar lo sagrado, leer textos Sagrados, ver cosas Sagradas; esto hace que el corazón sea puro. La confusión y la congoja que ahora los afligen son la consecuencia de la expresión impura y de ver lo impuro.

Estando yo en mi anterior cuerpo, Das Ganu, quien era funcionario de la policía, vino a Shirdi debido a su buena suerte. Aquella visita lo transformó. Además, Baba lo saludó por su nombre apenas lo vio, y esto lo dejó asombrado. Das Ganu le pidió a Baba que eliminara algunos partidos de oposición para que pudiera obtener un ascenso en su carrera oficial. Baba lo invitó a permanecer en Shirdi y a escapar a toda esa molestia. Baba le dijo: «No te preguntes por qué sugiero esto cuando me pides otra cosa». Después, cuando se le otorgó lo que deseaba, Das Ganu ignoró lo que Baba le había dicho, así como su promesa de retirarse tan pronto como su honor fuese reivindicado por la promoción oficial. Así, Baba tuvo que crear las circunstancias que hicieran que Das Ganu viniese finalmente a él, de acuerdo con su plan. Das Ganu compuso una serie de canciones y Stotras; comenzó a relatar cuentos (haríkatas) sobre Baba por doquier y fue el instrumento para la difusión de las noticias del advenimiento de Bhagavan a miles de personas en el país. Su vida transcurrió en el Señor y por el Señor.

Upasini Baba fue también una personalidad similar. Nació en 1869 y era conocido como Kasinat. Se casó tres veces, practicaba la medicina, ganaba mucho dinero y lo perdió todo; después de dura penitencia llegó a Shirdi, donde Baba lo saludó «¡Hola, Kasinat!». Baba lo dirigió hacia upasana (adoración) y lo guió en su práctica espiritual y por ello Kasinat fue llamado Upasini Baba. El también era parte del plan de Baba.

Asi, cada hombre debe ajustarse al plan; traten de conocer los principios superiores y de estar preparados para la tarea que el Señor les asigne. Estén siempre vigilantes en las tareas que este papel implica, las que son su propio deber (Swadharma). Dediquen totalmente su corazón a esta tarea. Rama quiere decir: «El que gusta, atrae y Se hace amar mediante atributos que agradan». Krishna significa lo mismo, «El que atrae»; Hari significa «El que roba el ser, el ego, y se revela como uno mismo». Para llegar a él ustedes deben ascender, y el ascender del animal al hombre y de éste al Señor (Madhava) es una dura lucha a causa de las fuerzas que los arrastran hacia abajo. Un automóvil viejo gime y se queja cuando tiene que subir una cuesta porque la máquina está sucia y desgastada. Conserven la máquina de la mente libre del polvo y de la suciedad de los deseos sensuales y podrán ascender fácilmente a las cumbres del progreso espiritual. Este viaje hacia la fuente del Ser es como nadar contra una corriente rápida. La justicia eterna (Sanathana Dharma) les enseña cómo tener éxito en este viaje; y por su integridad innata ha florecido sin perder su gloria prístina, aun después del asalto de oleadas de culturas extrañas. Nunca puede declinar porque es la verdad. Es la suma de la experiencia de devotos tales como Hanumán, Radha y Mira. Recuerden esto cuando se acerque el final del sacrificio (yajna), porque sólo esta clase de devoción asegura el logro (aptí) de sama o Brahma. Ése es el verdadero final (samaptí).

Muchos de ustedes se sienten inspirados a organizar en sus propios hogares reuniones (sangas) y comités para cantar bhajans, pero es difícil encontrar devotos del Señor sin que tengan deseos O intenciones ulteriores. Un devoto debe estar lleno de gozo, pase lo que pase, porque sabe que es la voluntad del Señor la que Se está haciendo. Yo no me dirijo a las reuniones de personas llamándolas Bhaktulara o «devotos” porque la sumisión completa y la pureza total esenciales en un devoto son cosas que no existen. Háganse ustedes mismos la pregunta de si cada uno de ustedes merece el nombre de «Devoto de Sai» («Sai Bhakta”) y sabrán por qué no me dirijo a ustedes de esa manera.

Cantar bhajans no tiene efecto Sólo por los tambores, cimbalos, violines, etcétera, que cubren la ausencia de lo esencial: sentimiento, emoción, anhelo, sinceridad, fe. Cuando ustedes se reúnen en grupos, aparecen las cualidades negativas de la envidia, la competencia, el orgullo y el sectarismo. Así, ofrezcan bhajans al Señor en sus propios hogares y no creen estos obstáculos organizando grupos, sociedades Y asociaciones.

¡Además, hay algunos que alaban a otros por la absurda. razón de que Sai Baba habla por medio de ellos! «Baba ha entrado en ellos”, pregonan a los cuatro vientos. «Oh, Baba ha entrado en este niño, en esta persona». ;Qué tontería! ¿Acaso soy un fantasma O un demonio para poseer a alguien y hablar por medio de él? Es sólo una comedia que engaña a las mentes morbosas. No caigan en esto.

Por eso les digo: mantengan su devoción dentro de ustedes, bajo control, y no dejenque la gente deshonesta y egoísta los engañe. Ellos los descarrian dándoles una idea falsa de la manifestación del Señor; ensucian la fe que sus hermanos y hermanas tienen en el Señor.

Las instituciones, Sociedades y asociaciones tienen otra falla. Las instituciones religiosas deben hacer que la gente tome conciencia de Dios y de su propia transitoriedad. Pero a su vez crean una gama de funcionarios, varios grados de membrecía, un secretario, un tesorero, un presidente y una serie de miembros de comités que se ufanan de sus insignias y se deleitan en. su propia supuesta grandeza. Una sociedad que lleve el nombre de Dios debe ayudar a la eliminación de los celos, de la envidia, de la vanidad, del egoísmo y de la codicia, pero estas asociaciones más bien los fomentan y permiten que crezcan desaforadamente. Los verdaderos devotos nunca anhelan tales posiciones; ellos más bien las evitan como trampas que los pueden arrastrar a la perdición.

Yo no necesito ninguna publicidad, como no la necesita ninguna otra manifestación del Señor. ¿A quién se atreven ustede
s a dar a la publicidad? ¿A mí? Déjenme preguntarles, ¿qué Saben ustedes de mí? Hoy dicen una cosa de mi y otra mañana. ¡Su fe no es inquebrantable! Ustedes me alaban cuando las cosas van bien y me culpan cuando van mal. Corren de un refugio a otro.

Pero incluso antes de que su devoción madure, tratan de conducir a otros; recogen donaciones y suscripciones y planean templos y asociaciones; todo esto es únicamente algo que produce pérdidas en lugar de ganancias espirituales. Al comenzar ustedes a hacer publicidad descienden al nivel de aquellos que compiten por reunir clientela, por denigrar a los demás y alabarse a si mismos. Donde se cuente y acumule dinero, y donde se exhiba el dinero para demostrar el propio progreso, yo no estaré presente; voy sólo donde se aprecia la sinceridad, la fe y la humildad. Asi, pasen las horas de silencio en meditación y recordación del nombre del Señor (Namasmarana) en sus propios hogares y profundicen su fe. Yo no escucho los bhajans que como discos grabados reproducen canciones y repeticiones de nombres (namavalis) sin ningún sentimiento O anhelo cuando se cantan. Horas de griterio no valen; un momento de oración concentrada desde el corazón es suficiente para ablandar y conmover a Dios.

Si ustedes niegan a Dios es como si se negaran ustedes mismos. Ustedes declaran «DiOs no existe», pero aseguran «Yo existo», Bien, ¿quién es ese yo que existe, que existe en todas las diversas etapas de crecimiento, físico y mental, en la alegría y el dolor? Ese Yo es Dios, créanlo. Porque ese yo es el que ve con los ojos, gusta con la lengua, camina con los pies, discute con la inteligencia, pero estando todo el tiempo conciente de estar separado de todo aquello. Cuando afirman «DiOs no existe», primero afirman y luego declaran la ausencia de esa entidad. Afirman la inexistencia de algo que es. Ese yo debe ser concebido como una ola en el océano de Dios, no como la primera persona del singular. Esa primera persona los conduce al mundo del temor y de la codicia. Mi casa, mi pueblo, mi comunidad, mi distrito, mi lenguaje, y así se enredan más y más inextricablemente.

Había un hombre de Putaparti que vivía en una choza Solitaria en la orilla del Ganges, unog kilómetros arriba de Haridwar. Él practicaba severas disciplinas y era muy admirado por otros monjes. Un día, mientras se bañaba en el río, oyó a un grupo de peregrinos, que habían bajado del autobús en ese lugar, hablando entre ellos en télugu. Su apego a su lengua materna lo hizo acercarse a los peregrinos y preguntarles de dónde venían. Éstos le dijeron que venían de Rayalasima; él quiso saber más; ellos eran del Distrito de Anantapur; los oídos del monje ansiaban oir más detalles. Los peregrinos eran del distrito de Penukonda, en verdad, del mismo Putaparti. Así, el monje se sintió muy feliz; les preguntó por sus propias tierras, su familia, sus amigos y cuando le dijeron que algunos de ellos habían muerto, el pobre monje comenzó a llorar como un tonto. Todos sus años de prácticas espirituales se desvanecieron, se derrumbaron ante el ataque del apego a su idioma. ;Así estaba de atado a su lengua materna. ¡Qué lástima!

Practiquen el desapego de ahora en adelante; practíquenlo poco a poco, porque el día llegará, tarde o temprano, en que tendrán que renunciar a todo lo que les es querido. No continúen añadiendo cosas que los atan. Átense al Gran Liberador, a Dios mismo.