Cierta vez, un monje estaba bañándose en el Ganges, cuando vio que un escorpión flotaba corriente abajo, sobre un trozo de leña.. Este es Dios, dentro de la forma y el nombre de un escorpión, sintió; y quiso salvar al escorpión. Entonces lo puso sobre su palma, pero cuando fue picado, lo tiró al agua. Luego se sintió afligido por el remordimiento, así que volvió a levantarlo. Como consecuencia, el escorpión lo picó cinco o seis veces; igualmente él persistió en su misión misericordiosa y finalmente, pudo dejarlo sobre tierra seca, para que pudiese continuar su camino, vivo y feliz. Muchas personas vieron sus esfuerzos y se burlaron por su simpatía estúpidamente exagerada. El monje les dijo que el escorpión le había enseñado una lección y que le estaba agradecido por esto. Entonces le preguntaron cuál era esa lección.. Él respondió: «Aférrate a tu naturaleza innata, pase lo que pase. Eso es lo que me ha enseñado». Su naturaleza es picar; el picó, sin importarle a quién o cuándo. La naturaleza del ser humano es alcanzar Jnana (la sabiduría), ananda es la esencia del hombre. El amor es la corriente sanguínea que lo sostiene, la paz es la visión que lo guía y lo dirige. Sathya Sai. (Discurso del 22 de abril de 1967).