Es incorrecto afirmar que las cualidades y los logros necesarios para el progreso temporal y el progreso espiritual son diferentes entre sí. El espiritual es solo la purificación del temporal. En ambos casos, el éxito o el fracaso dependen de la atención enfocada en un punto (ekagrata). La atención enfocada es muy importante para cualquier trabajo. Esto también es una disciplina espiritual. Existen dos sendas a través de las cuales se puede seguir esta disciplina espiritual : sin atender a ningún punto o atendiendo a múltiples puntos. No enfocarse en ningún punto es el estadío del sueño, y también se lo llama la cualidad de la ignorancia (tamoguna). Tratar de atender a muchos puntos es el resultado de la hiperactividad (rajoguna), que desvía la vista hacia la creación y sus atracciones. Si se evitan estos dos caminos, no cayendo en extremos, con los ojos ni muy cerrados como en el sueño ni totalmente abiertos como en estado de vigilia, sino entreabiertos y dirigidos a la punta de la nariz, la cualidad de la pureza (satwaguna) se convertirá en la propia naturaleza, y también se podrá alcanzar fácilmente la concentración de la mente. Sathya Sai. (Dhyana Vahini. Capítulo 8. Versión en inglés)
