Habrán celebrado muchos festivales de Ugadi (día de Año Nuevo) en su vida. Ciertas prácticas tradicionales son llevadas a cabo en cada festival, como tomar un baño sagrado, usar ropa nueva, limpiar la casa y decorarla con guirnaldas de hojas verdes. La grandeza reside en purificar nuestros pensamientos, no solo el transitorio cuerpo humano. La importancia de un festival no radica en usar ropa nueva sino en cultivar nuevos y nobles pensamientos. La casa debe ser decorada no solo con guirnaldas de hojas verdes sino con guirnaldas de amor. Compartan su amor con todos los que visitan su casa. Solo entonces estaremos celebrando el festival según su espíritu verdadero. Hoy en día, la humanidad está afligida por el miedo y la inquietud. El coraje y la fuerza están en declive debido a pensamientos que no son sagrados y a sentimientos malvados. Sus enemigos no están afuera. ¡Los malos pensamientos son sus peores enemigos y los nobles pensamientos basados en la Verdad son sus mejores amigos! (Discurso Divino del 18 de marzo de 1999)
